Agios Galas
Las cuevas forman parte de un antiguo cauce subterráneo que apenas se ve desde el exterior a dia de hoy. Se trata de un grupo de tres cuevas abiertas una encima de otra, siendo la superior la más desconocida. La entrada de la cueva del medio se convirtió en una iglesia llamada “Panagia Agiogalousena”. La cueva inferior, la más grande de las tres, se ha hecho accesible de forma que los visitantes puedan recorrerla. A lo largo de los últimos 150 millones de años, la lluvia ha creado un sistema de cuevas en la propia piedra caliza. Se trata de un largo pasillo, de unos 220 metros de longitud, que forma meandros y grandes zonas con cámaras laberínticas. Los visitantes pueden explorar unos 120 metros de la cueva. Si se mira con atención y se da rienda suelta a la imaginacion se pueden ver esculturas de animales y otros objetos. La humedad y el goteo son muy intensos dentro de la cueva, mientras que la temperatura varía entre el verano y el invierno en torno a los 10 y 15 grados, por lo que es aconsejable llevar un jersey.
Agios Galas es un pueblo del noroeste de Quíos. Se encuentra en la cima de una colina a 70 kilómetros de la ciudad principal de Quíos. Debido a su posición en las montañas, Agios Galas estaba protegida contra las invasiones piratas. El pueblo recibe su nombre por el “agua lechosa” (gala= leche en griego) que sale de las piedras del complejo de cuevas que hay debajo del pueblo. Está demostrado que ya había gente en esa región durante el Neolítico, porque los arqueólogos han encontrado herramientas, fragmentos de vasos y huesos.